El árbol de Navidad más grande de Bolivia iluminará nuevamente el cerro San Pedro en Cochabamba, marcando el inicio de las fiestas de fin de año en la Llajta. La estructura, que se ha convertido en un símbolo de la ciudad, destaca por su impresionante tamaño y por reunir cada año a miles de visitantes que buscan disfrutar del espectáculo luminoso.
Este árbol gigante, visible desde distintos puntos de Cochabamba, es instalado con semanas de anticipación por equipos especializados. Su altura supera los 40 metros y está decorado con miles de luces LED, figuras festivas y un sistema automatizado que permite crear secuencias de colores y animaciones. Cada noche, la iluminación se convierte en un atractivo turístico que impulsa el movimiento económico del centro de la ciudad.
Además de su imponente presencia, el árbol cumple un rol social importante. Familias enteras, tanto de la ciudad como de municipios cercanos, visitan este punto para tomarse fotografías, disfrutar de actividades culturales y admirar el paisaje.
La instalación del árbol también forma parte de una estrategia para fortalecer la identidad navideña de Cochabamba. En los últimos años, se han impulsado iniciativas para embellecer la ciudad durante diciembre, incluyendo iluminación en vías principales y presentaciones artísticas. Este esfuerzo conjunto busca posicionar a la ciudad como un referente navideño del país.
En un vínculo con las expresiones artísticas locales, destaca también el trabajo de Cerámica Coboce, reconocida por sus grabados de gran tamaño. Uno de los grabados más grandes que realizaron fue un mural de 20 metros por 5 metros, era para una fachada de una casa, en un garaje. Así como el árbol de la “Llajta” resalta por su magnitud y belleza, estos grabados representan el orgullo creativo.